Cuando me di cuenta llevaba 2 horas seguidas sin parar y, os
puedo asegurar que no soy un gran amante de probar juegos freeware o indies.
Y aquí me encuentro después de terminarlo, haciendo el análisis
de este mito desde ya, de los juegos freeware y los shoot’em up en 2D.
El juego empieza con una escueta introducción, donde vemos una
nave ser destruida por otra mayor y con mala pinta (vamos los malos) y así de
simple empieza nuestra andadura, que consistirá en destruir al dios Hydorah y,
a todos sus secuaces que se quieren hacer con el control de la galaxia.
La historia pasa desapercibida para darnos paso a lo que
realmente nos interesa, que es la acción pura y dura (que desde el primer segundo
se deja notar y de qué manera), aunque hay que reconocer que hay momentos en
los que se nos sigue con algo de narración o, con comunicaciones con los
nuestros. Cuando salen están bien realizadas, y al final sin decir muchas
palabras todo queda totalmente claro, además de que tenemos variaciones en la
historia, dependiendo de lo realizado en el camino, que desemboca en 3 finales
diferentes, chapó, como otro gran juego indie ( Cave Story).
Jugabilidad, el pilar central del juego se basa en muchas
sagas como bien comenta Locomalito (su
creador) en su web, Gradius, Turrican, R-Type, incluso Castlevania en muchas músicas,
y muchos más juegos de finales de los 80 y principios de los 90, una época dorada
para los shoot’em up. Lo que nos encontraremos será eso un matamarcianos clásico
que se basa en lo mejor de aquella época pero que no lo copia y pega, sino que
coge sus ideas y las mete en escena de la manera que el creador mejor cree en
cada ocasión, dando una mezcla explosiva.
Vayamos por los botones, con 2 simples botones lo
controlamos todo, más el joystick o las 4 flechas de dirección. Un botón será el
disparo normal y el otro la bomba. Iremos cogiendo contenedores para ir aumentando
por un lado el disparo, por el otro las bombas y también los misiles o la opción
que hayamos seleccionado, aparte de poder llevar hasta 3 bombas y aumentar la
velocidad. Antes de cada misión tenemos la opción de configurar nuestra nave
con que disparo querremos salir a batallar, al igual que los misiles o las
bombas, ya que con cada pantalla acabada se nos otorgará una nueva arma o un save
point. También podremos elegir la mejor ruta para llegar hasta el planeta
Meropticon, pudiendo eludir grandes retos como el Path of scylla, pero teniendo
un final diferente, al igual que se nos da la oportunidad de recoger secretos
y, recoger algo especial cuando se tienen todos, que solo podremos recoger la
primera vez que pasemos por esa fase, porque al terminarla, ya no podremos
volver a ella. Todo esto crea una estrategia, de como jugar las fases y usar
con cabeza los pocos save points que te da el juego, porque es mejor conseguir
unas armas que otras, porque para según qué niveles es mejor una u otra.
A nivel jugable el juego es como los de antaño, desde el
primer instante te acabaras empotrando con el primer tramo de rocas sin ningún
problema, poniendo cara de tonto y diciéndote a ti mismo, huy esto va ser difícil.
Pero al tiempo le vas pillando el control, y como bien dice el juego en una de
sus muchas frases cada vez que mueres, tienes que sentirte orgulloso de cada
nivel superado, y vaya si tienes que estarlo, he llegado a maldecir al juego
muchas veces, pero siempre volvía para intentarlo de nuevo(Esto no lo sentía desde
Dark Souls), como en los juegos de antaño, que no había tregua ninguna, y al menos
aquí podemos grabar, y las fases están separadas por secciones, que si nos
matan no empezaremos desde el principio. E visto muchas quejas de jugadores de
que si no fuera tan difícil le hubieran dado una oportunidad, haber señores,
ahora los juegos nos regalan las cosas, donde están los retos!, esa sensación cuando
acabas una fase después de haber esquivado miles de balas y enemigos, en una
mezcla de estrés y agilidad mental que hacen disparar la adrenalina por los
aires, eso no tiene precio, si el juego es difícil, pero no más que lo eran los
shoot’em up de los 80, y si lo e terminado yo que soy un jugador de habilidad
normal en los matamarcianos, con paciencia casi todo el mundo puede.
El juego no sigue una progresión de dificultad fija, primero
porque podremos elegir fases y, ninguna es igual a otra,16 fases, divididas en
varias sub-fases, dan para mucho, 70 enemigos diferentes, y 30 jefes dan muchísima
variedad, y ninguno decae en calidad, simplemente en ritmo o acción al ser
todos diferentes. Mención especial las luchas con los jefes, tremendamente
buenas y bien definidas, habiendo que memorizar bien sus ataques, y teniendo
agilidad de gato, como mínimo, por ejemplo, como me a costado NO MERCY, la penúltima
pantalla del juego en la que te tienes que enfrentar a 7 jefes seguidos uno detrás
de otro, y encima el final es para acojonar hasta a Chuck Norris.
Gráficamente solo
verlo pensé que era un clon de los Gradius de SNES, estilo de 16 bits y muy
colorido, pero conforme vas jugando ves que no clona nada, simplemente a tomado
las ideas, pero todo es de nueva creación, dando un resultado de homenaje a
aquella época. Todo corre con scroll horizontal, pudiendo agrandar las fases en
muchas ocasiones dándonos opción de recorrer el escenario más para arriba o
abajo, todo con una suavidad tremenda, un despliegue de creación de sprites buenísimo,
y la calidad del dibujado de los escenarios es genial, al igual que el de los
jefes, algunos con varias transformaciones. Los efectos especiales y las
animaciones se salen de la media, y son más dignas de la época de 32 bits que
de la 16, efectos luminosos, de explosiones, rotaciones, varios fondos y demás parafernalia
digna de estar entre el catálogo de la gran NEO-GEO, y todo realizado por un
amante de lo videojuegos que utiliza el Game maker.
El sonido es un punto y aparte, realizado por Gryzor87,
compañero de fatigas de Locomalito, estamos ante una nueva BSO impecable en el
mundo de los videojuegos. Me e quedado totalmente asombrado de la calidad
musical, desde el tema principal del menú, hasta el tema final de los créditos,
todo de una calidad envidiable, realizada con un toque retro, al más puro
estilo sintetizador como en los 80. Cada música está unida a cada nivel y a
cada acontecimiento que sale en pantalla, no está ahí para rellenar, cada
subida de acción está implementada en la banda sonora, dando como resultado una
conexión excelente, que ayuda aún más, si cabe, a impresionar al jugador y a
meterlo dentro de la acción de manera brillante.
Conclusión:
Esta mas que claro que me llevado un sorpresón como la copa
de un pino, un juego que no ha hecho demasiado ruido para la calidad que
alberga, y que si estuviera en alguno de los portales de descarga como PSN o
XBLA, estoy seguro que el señor Locomalito se llevaría un buen pellizco, aunque
hay que respetar su no inclusión, por su filosofía de juego gratis.
Un juego que me ha vuelto hacer sentir algo nuevo en estas épocas
en que los shoot’em up escasean, y que no sentía desde el gran Ikaruga o
Gradius V.
Felicitar a Locomalito/Gryzor87 su gran trabajo y, animar a
todo el mundo a probar esta joya del espacio, que de bien haber salido en la época
en la que se centra, estaríamos ante un must have.
+Gráficos con un nivel artístico impecable
+Jugabilidad de la vieja escuela, implementada a la perfección
+Música de otra galaxia
+Difícil, sí, pero satisfactorio
+Es español, pero esta en ingles, pero es totalmente jugable
-Una secuela por favor!!!
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